Asturias se caracteriza por un extenso paisaje costero flanqueado por altas montañas, donde el clima, las corrientes y el oleaje han esculpido un espacio natural espectacular.
La Q de Calidad Turística es un distintivo que reconoce la excelencia de las playas, y en 2024, como ha ocurrido de forma continua desde 2004, la Playa de Santa Marina en Ribadesella ha sido nuevamente destacada con esta certificación, que avala su compromiso con altos estándares en servicios e infraestructura.
La playa de Santa Marina cuenta con una amplia gama de servicios de temporada, entre los que se incluyen:
- Salvamento y socorrismo.
- Asistencia al baño para personas con movilidad reducida.
- Instalaciones como duchas, lavapiés, aseos y accesos adaptados.
- Alquiler de hamacas y sombrillas.
Situada en la desembocadura del río Sella, en su extremo oeste se pueden observar icnitas (huellas fosilizadas de dinosaurios).
Ribadesella alberga varias playas más, entre las que destacamos:
- Playa de Vega: Conocida por su entorno salvaje, es ideal para los amantes del surf. La playa tiene una longitud de más de un kilómetro y su arena es fina.
- Playa de Arra: Esta pequeña cala es perfecta para quienes buscan tranquilidad. Su acceso es algo complicado, pero su belleza natural compensa el esfuerzo.
- Playa de La Atalaya: Situada en el casco histórico, es una playa urbana más pequeña pero muy apreciada por los locales. Ofrece un ambiente acogedor y buenas condiciones para el baño.
- Playa del Portiellu: De difícil acceso, es una cala rodeada de restos mineros, ideal para quienes buscan un lugar menos concurrido.
En el concejo vecino de Llanes, destacan los acantilados de los bufones, impresionantes grietas en las rocas que actúan como chimeneas donde, en marea alta, el agua del mar es expulsada con un silbido similar al de un géiser.